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Lesiones en Corredores

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Correr es una de las actividades favoritas para aquellas personas que buscan mantenerse en forma y tener una disciplina que mejore su condición física sin necesariamente requerir un entrenamiento profesional.

Correr es una de las actividades favoritas para aquellas personas que buscan mantenerse en forma y tener una disciplina que mejore su condición física sin necesariamente requerir un entrenamiento profesional.

Además, puede realizarse en solitario o con compañía, por lo que este ejercicio es ampliamente recomendado, ya que, entre sus beneficios se encuentran:

  • Mejora la salud cardiovascular.
  • Quema de calorías.
  • Liberación de endorfinas.
  • Fortalecimiento de todos los músculos del cuerpo.

Con toda esta información, seguramente estarás pensando en elegir unos tenis de tu armario y comenzar una rutina de ejercicios que incluya correr, sin embargo, también es importante que tengas en mente las lesiones que pueden ocasionarse al correr, y sus causas específicas, de este modo te será más sencillo evitarlas e iniciar con esta saludable práctica.

En seguida enumeramos las lesiones más comunes:

  • Tendinitis del tendón de Aquiles. Esta dolencia es una sobrecarga muscular que se da cuando se excede el tiempo de entrenamiento.
  • Síndrome de estrés tibial. Se trata de un dolor punzante en la cara anterior o posterior de la pierna que se da por iniciar prematuramente un ejercicio.
  • Lesión de isquiotibiales. Ocurre cuando los músculos, especialmente del muslo y cadera, se estiran más allá de su capacidad.
  • Lesiones en la espalda baja. Se derivan de una mala postura o una técnica indebida al ejercitarse.
  • Fracturas de estrés. Aunque estas son lesiones menos comunes, son resultado del impacto repetitivo del pie contra el suelo bajo condiciones negativas, como lo son utilizar un mal calzado o un suelo inadecuado para este entrenamiento.
Como ya te dijimos, estos datos son exclusivamente para que tomes precauciones antes de iniciar a correr, ya sabes lo que dicen, más vale prevenir que lamentar, y para comenzar con esta vigorizante rutina te recomendamos que planifiques y comiences de a poco, un buen entrenamiento tiene que ser progresivo así que es importante tomar en cuenta estos puntos para que nunca te suceda una de estas lesiones:
  • Haz un calentamiento adecuado para preparar a tus músculos antes de correr; prueba combinando estiramientos estáticos y dinámicos, si quieres conocer más de este tema, te invitamos a leer nuestra entrada anterior en esta liga:
    https://medphy.mx/2023/07/04/estiramiento-estatico-vs-estiramiento-dinamico/
  • Agrega otras actividades a tu rutina que ayuden al fortalecimiento de tus músculos, prueba con natación o yoga.
  • Intenta el masaje y terapias de liberación miofascial, puedes hacer uso de tus propias manos o acudir directamente con un profesional que sabrá focalizar el tratamiento.
Recuerda que siempre es importante escuchar a tu cuerpo, solo él sabrá darte las señales sobre cómo va tu entrenamiento, si es necesario, modera tus actividades hasta que los músculos se vayan acostumbrando a la nueva actividad, y si lo consideras necesario, acude con un profesional que pueda apoyarte con el diagnóstico de alguna lesión y adaptar las técnicas de carrera de acuerdo con tus necesidades.

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